Según afirmaba un reciente estudio publicado por Actas de la Royal Society B Ciencias Biológicasel nuevo ecosistema marino de pérdida arrecifes donde predomina es rocas blancas formadas por coral muerto provoca que ciertas especies de peces no pueden identificar a sus competidores y predators.
Para llevar a cabo el trabajo, los especialistas tomaron como referencia principal a los peces de la familia Chaetodontidaemás popularmente conocidos como « peces mariposa”, debido tanto a sus colores brillantes como, así también, a sus particulares aletas alargadas que guardan una gran similitud con las alas de una mariposa.
Así, realizó más de 3.700 avistamientos de 38 especies de esta especie ictícola en arrecifes y compararon su comportamiento antes y después de la decoloración del coral.
jras la mortalidad del coral que dio lugar al blanqueamiento, las señales entre peces de distintas especies de que no se trataron de una amenaza fueron menos frecuentes, en tanto que los encuentros se convertirán en persecuciones en más del 90% de los casos, frente al 72% antes del blanqueamiento
Asimismo, los investigadores lograron establecer que la distancia de esta persecución aumentó tras el blanqueamiento y que los peces gastaban mucha más energía que antes en ahuyentar a los posibles competidores.
“El as disturbios que se han producido en los últimos años, como el blanqueamientoalteren la abundancia y la diversidadad de los coralesQue eres principal alimento de los peces mariposa”, explicó la tesis Sally Keith, autoridad principal del estudio.
“Al reconocer a otro pez competidor, los peces mariposa pueden decidir si intensificar la lucha o se retiran de ellacon lo que pueden conservar energía y prevenir lesiones. sin embargo, reglas de combate evolucionaron para un terreno concreto que ahora está cambiando”, añadió la también profesora titular de Biologie Marina de la Universidad de Lancaster, Inglaterra.
Así que por el momento los investigadores no tienen en claro si estos peces tienen la capacidad de actualizar el libro de reglas con la rapidez suficiente para recalibrar sus decisiones, esperan que los próximos los puedan ayudar ayudar a entender mucho mejor el comportamiento de los animales frente al cambio climático que está afectando el planeta.
“Se espera que, para el año 2050, el 90% de los corales sufran de blanqueamientopor lo que comprener cómo se van a comportar sus habitantes puede ser clave para estratagemas de diseño que permite la conservación de la mayor cantidad de especies posibles y, así, minimizar los dañoss”, concluyó Keith.
